enero 30, 2018 10:08 am Deja tus comentarios
La ola de la diversidad de género es creciente. Pero más allá de titulares de Davos o conferencias donde el powerpoint acalla conciencias, más allá del ruido hemos de llegar a la acción de una prioridad de negocio.
Por si no se hubiera demostrado ya suficientemente disponemos de un nuevo estudio de Mckinsey “Delivering through diversity” que correlaciona fuera de toda duda (p<0.05) la diversidad de género y los resultados financieros positivos (EBIT)
En el estudio se mide el Bº no solo en términos de EBIT sino además en creación de valor a largo plazo. Además nos orienta sobre estrategias y acciones de éxito.
Los resultados de las compañías con más ejecutivas muestran un 21% de mayor probabilidad de tener resultados por encima de la competencia con menos mujeres en posiciones ejecutivas. Además un 27% de mayor probabilidad de tener mejores resultados de creación de valor a largo plazo.
Esta correlación se produce en todas las geografías estudiadas. Dado mi origen me es especialmente grato ver que Australia se distingue con un 21% de mujeres en posiciones ejecutivas y 30% en consejos muy por encima de EEUU que tan sólo muestra un 19% de mujeres en posiciones ejecutivas y 26% en consejos.
Los pocos críticos que quedan del tema dirían que una correlación no demuestra causalidad y tienen razón, la causalidad es difícil de estudiar. Pero tenemos hipótesis muy fundamentadas que explican la correlación porque las organizaciones con mayor igualdad de género en el liderazgo logran: atraer talento del 100% de la base de talento; una mayor orientación al cliente pues los compradores y compradoras están mejor representados; mayor satisfacción del empleado y empleada ; una toma de decisiones más eficaces y mayor innovación. La neurociencia explica los comportamientos de liderazgo diferenciados observables en otros estudios. Comportamientos de liderazgo que se complementan y facilitan una cultura más adaptada a las exigencias de la era en que vivimos.
Las compañías encuentran retador aumentar la participación femenina en los círculos de poder, especialmente en algunos sectores como los industriales, energía, automoción que cuentan además con una dificultad añadida en la carencia de igualdad en representación en las carreras STEM. Aun así hay compañías que lo logran o que logran resultados muy por encima de la media. ¿Qué hacen?
- Compromiso del CEO y el equipo directivo que se hace público en sus comunicaciones y objetivos individuales
- Establecen el liderazgo equilibrado como prioridad de negocio: medir internamente, identificar estrategias y acciones prioritarias para atraer desarrollar y retener el talento femenino
- Plan de igualdad para toda la organización, creando una cultura inclusiva que reduce la discriminación inconsciente. Se combinan medidas duras y blandas para lograr un cambio sostenible
- Adaptar las estrategias a diferentes partes del negocio, geografía, sector y contextos socioculturales.
Convertir la ola en algo productivo requiere que activemos a los hombres, que dejemos ya de hablar del “asunto de mujeres” y con entendimiento y convencimiento de forma inclusiva abordemos ésta gran oportunidad. Una oportunidad de lograr impulsar nuestra economía de forma sostenible y socialmente justa.
Os invito a participar en nuestro próximo foro “Hombres a Bordo” que organiza PWN Bilbao el 19 de Febrero Lunes a las 18:30hr en el Bizkaia Aretoa, en Abandiobarra, Bilbao donde hablaremos con importantes líderes, hombres y mujeres de la economía vasca. Entrada gratuita pero hay que registrarse, te esperamos.
https://pwnbilbao.net/events/1208-men.html
Tags: Exito, hombre, Liderazgo, mujer, negocio
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Este post fue escrito porRosa Urtubi
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